Juicio a los represores de San Lorenzo: tres condenas
El Tribunal Oral Federal 1 (TOF1) de Rosario condenó este jueves a ocho años y seis meses de prisión a los tres acusados en un juicio por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura en la ciudad de San Lorenzo, cuya única víctima falleció en junio pasado luego de declarar en el juicio oral.
Las condenas establecidas por el tribunal recayeron sobre los militares retirados Rubén Osvaldo Cervera y Horacio Hugo Maderna, quienes fueron jefe y subjefe del Batallón 121 de Arsenales de Fray Luis Beltrán durante la última dictadura; y sobre el abogado Pedro Rodríguez, asesor legal del municipio en aquellos años.
De acuerdo a la sentencia, leída el mediodía de este jueves por el presidente del TOF1, Otmar Paolucci, los tres acusados fueron condenados por los delitos de privación ilegítima de la libertad, calificada por su carácter de funcionarios públicos y por mediar violencia y amenazas, en concurso real con la aplicación de tormentos, calificado por ser la víctima un perseguido político.
En los casos de los militares retirados fueron condenados en su condición de coautores de esos delitos, mientras que Rodríguez fue encontrado “partícipe necesario” de los mismos.
Las condenas fueron celebradas por los familiares de la víctima en el juicio, el ex secretario general del Sindicato de Municipales de San Lorenzo, Manuel Casado, quien también era militante de la agrupación Sabino Navarro y falleció el 13 de junio pasado, unos días después de declarar en el debate oral.
El tribunal resolvió también que los tres condenas cumplan la prisión en una cárcel del Servicio Penitenciario Nacional una vez que la sentencia se encuentre firme.
El fiscal del caso, Gonzalo Stara, había solicitado al tribunal una condena de 20 años de prisión para Cervera y Maderna y de 18 años para el civil Rodríguez.
Aguante y duelo
Apenas concluida la lectura del veredicto, sobre el bulevar se improvisó una radio abierta para que hagan uso de la palabra familiares de Casado, testigos y organismos de derechos humanos, que comenzó con un minuto de silencio por el querellante fallecido y por las víctimas de la explosión de calle Salta al 2100.“Hoy todos sufrimos, no lo tenemos a mi papá, pero sí tenemos un recuerdo muy lindo: que él peleó para que la verdad se conozca”, dijo tras conocerse la sentencia Manuel Casado, el hijo mayor del dirigente gremial que fue víctima del terrorismo de Estado.
“No dejemos de pelear, seamos valientes como él lo fue, no nos callemos más”, abundó el joven.
Además, recordó que “este es el principio, porque todavía faltan 17 compañeros más que fueron desaparecidos” en San Lorenzo durante la dictadura.
Soledad Chiodín, del Espacio por la Memoria, la Verdad y la Justicia de San Lorenzo, dijo que “hoy teneos que estar orgullosos, porque no solo dimos batalla y le dimos contenido con esta lucha a la dictadura cívico-militar, sino que empezamos a cambiar entre todos la historia de San Lorenzo”.
“El poder económico y las corporaciones están presas. Nos falta la causa grande, la de los 17 compañeros”, añadió.
Y señaló que “de todas maneras se hace justicia con una condena, porque peor que un delito de lesa humanidad hubiera sido la impunidad, y esto es lo que no ocurrió en este caso”.
Edilio Quiroga, amigo de Casado y testigo del juicio, dijo sentir tras la sentencia “una sensación de tranquilidad”.
“Hoy está la presencia de Manuel, que falleció antes de eso, siempre tuvimos como objetivo que no queríamos venganza, sino justicia para el futuro, para que nunca más allá haya terrorismo de Estado y que este estado de derecho sea para siempre”, agregó Quiroga.
Su compañera Viviana Della Siega, también víctima del terrorismo de Estado, señalo en relación a los condenados que “estos tres van a ir presos, y yo agradezco que hayan tomado la causa con tanta seriedad y se haya trabajado tan bien”.
“Hoy no sé si decir que podemos festejar, pero sí agradecer que estas basuras están presas y van a seguir presos porque hay 17 compañeros y compañeras asesinadas, todos jóvenes trabajadores, que esperan una condena a perpetuidad, porque eso es lo que se merecen”, concluyó.
Por su parte el abogado de Casado, Gustavo Feldman, recordó que “en su momento dijimos desde la querella que se podía llegar a un juicio donde quedara esclarecida la verdad y se hiciera justicia”.
“Creo que la condena hace justicia, el monto de pena es una cuestión subjetiva a de los jueces, quizá en mucha gente anida la idea de que deberían haber sido más años de prisión”, añadió el abogado.