JUICIO HOSPITAL MILITAR DE PARANÁ El acusado que acusa
El represor Juan Daniel Amelong, afirmó este martes que los médicos propietarios del Instituto Privado de Pediatría (IPP) de la capital entrerriana “saben” el destino del mellizo varón de la detenida-desaparecida Raquel Negro, nacido en marzo de 1978 en el hospital militar de Paraná. El militar se quejó de que no se les haya abierto una causa por falso testimonio.
Tras haber transcurrido buerna parte del juicio oral y público que investiga el destino de Raquel Negro y sus mellizos, Amelong ‒seriamente complicado por las pruebas producidas a lo largo del proceso‒, pretendió desligar parte de su responsabilidad apuntando contra los médicos del instituto médico provado de Paraná.
“Si hay alguien que sabe qué paso con el bebé varón son los médicos del Instituto Privado de Pediatría”, dijo el ex integrante del grupo de tareas que trajo a Negro desde el centro clandestino de detención Quinta de Funes ‒ubicada en las afueras de Rosario‒, para dar a luz en el nosocomio castrense de Paraná.
Amelong remarcó que los tres socios propietarios del IPP “fueron objeto de severas advertencias” por la reticencia que evidenciaron en sus declaraciones ante el tribunal oral federal de Paraná que investiga el funcionamiento de una maternidad clandestina en el hospital militar local.
En ese sentido, el represor señaló que los médicos no aportaron datos a la investigación a pesar de que los hijos mellizos de la mujer estuvieron internados en el IPP, como quedó demostrado en los registros de pacientes.
“No vi que se les haya formado una causa por falso testimonio y ellos saben a quién les entregaron las criaturas”, dijo en referencia a los doctores Miguel Torrealday, David Vainstub y Angel Schroeder, propietarios del IPP.
A pedido de los abogados querellantes, el tribunal citó a declarar a Pablo Martín Navone, hijo del militar Paul Navone, quien se suicidó en Córdoba en 2008, el mismo día que tenía que declarar en Paraná en la causa que investiga el funcionamiento de la maternidad clandestina.
El joven, en declaraciones a El Diario de Paraná afirmó que, antes de suicidarse, su padre le reveló que Amelong y Walter Pagano (otro de los imputados) se llevaron a la hija de Negro y la abandonaron en la puerta de un orfanato de Rosario, mientras que el varoncito murió a poco de nacer.
Por secretaría se informó que el joven no concurrirá a declarar porque viajó a España y regresará recién a fines de octubre.
El tribunal federal citó también a declarar al periodista que le hizo la nota a Navone, Juan Cruz Varela, quien reveló que tuvo que viajar a Córdoba para entrevistarse con el hijo del militar suicidado.
Varela ratificó que Navone le dijo que el hijo varón de Raquel Negro falleció en el parto y que a la niña se la llevaron Amelong y Pagano para dejarla en la puerta de un orfanato rosarino.
En la causa Hospital Militar se juzga a los militares Juan Amelong, Walter Pagano, Marino González, Jorge Fariña y Pascual Guerrieri y al médico Juan Antonio Zaccaría.
A los imputados se los acusa de haber trasladado desde Rosario a Raquel Negro hasta el hospital militar local para dar a luz a mellizos, un varón y una mujer.
La niña, abandonada en un orfanato de Rosario y anotada como Sabrina Gullino, recuperó su identidad en 2008, en parte por el relato del represor Eduardo Costanzo, que fue quien brindó detalles del operativo de traslado de la mujer a Paraná.
El hermano mellizo de Sabrina continúa siendo buscado, a pesar de que Costanzo afirmó ante el tribunal que el chico está en el seno de la familia del suicidado militar Navone.
Fuentes: Blog Causa Hospital Militar, Télam
Tras haber transcurrido buerna parte del juicio oral y público que investiga el destino de Raquel Negro y sus mellizos, Amelong ‒seriamente complicado por las pruebas producidas a lo largo del proceso‒, pretendió desligar parte de su responsabilidad apuntando contra los médicos del instituto médico provado de Paraná.
“Si hay alguien que sabe qué paso con el bebé varón son los médicos del Instituto Privado de Pediatría”, dijo el ex integrante del grupo de tareas que trajo a Negro desde el centro clandestino de detención Quinta de Funes ‒ubicada en las afueras de Rosario‒, para dar a luz en el nosocomio castrense de Paraná.
Amelong remarcó que los tres socios propietarios del IPP “fueron objeto de severas advertencias” por la reticencia que evidenciaron en sus declaraciones ante el tribunal oral federal de Paraná que investiga el funcionamiento de una maternidad clandestina en el hospital militar local.
En ese sentido, el represor señaló que los médicos no aportaron datos a la investigación a pesar de que los hijos mellizos de la mujer estuvieron internados en el IPP, como quedó demostrado en los registros de pacientes.
“No vi que se les haya formado una causa por falso testimonio y ellos saben a quién les entregaron las criaturas”, dijo en referencia a los doctores Miguel Torrealday, David Vainstub y Angel Schroeder, propietarios del IPP.
A pedido de los abogados querellantes, el tribunal citó a declarar a Pablo Martín Navone, hijo del militar Paul Navone, quien se suicidó en Córdoba en 2008, el mismo día que tenía que declarar en Paraná en la causa que investiga el funcionamiento de la maternidad clandestina.
El joven, en declaraciones a El Diario de Paraná afirmó que, antes de suicidarse, su padre le reveló que Amelong y Walter Pagano (otro de los imputados) se llevaron a la hija de Negro y la abandonaron en la puerta de un orfanato de Rosario, mientras que el varoncito murió a poco de nacer.
Por secretaría se informó que el joven no concurrirá a declarar porque viajó a España y regresará recién a fines de octubre.
El tribunal federal citó también a declarar al periodista que le hizo la nota a Navone, Juan Cruz Varela, quien reveló que tuvo que viajar a Córdoba para entrevistarse con el hijo del militar suicidado.
Varela ratificó que Navone le dijo que el hijo varón de Raquel Negro falleció en el parto y que a la niña se la llevaron Amelong y Pagano para dejarla en la puerta de un orfanato rosarino.
En la causa Hospital Militar se juzga a los militares Juan Amelong, Walter Pagano, Marino González, Jorge Fariña y Pascual Guerrieri y al médico Juan Antonio Zaccaría.
A los imputados se los acusa de haber trasladado desde Rosario a Raquel Negro hasta el hospital militar local para dar a luz a mellizos, un varón y una mujer.
La niña, abandonada en un orfanato de Rosario y anotada como Sabrina Gullino, recuperó su identidad en 2008, en parte por el relato del represor Eduardo Costanzo, que fue quien brindó detalles del operativo de traslado de la mujer a Paraná.
El hermano mellizo de Sabrina continúa siendo buscado, a pesar de que Costanzo afirmó ante el tribunal que el chico está en el seno de la familia del suicidado militar Navone.
Fuentes: Blog Causa Hospital Militar, Télam